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Tshegofatso Senne

Imagen del toolkit de GLITCH 

Las últimas investigaciones destacan que las mujeres negras tienen 84% más de probabilidades de ser mencionadas en tweets abusivos o problemáticos que las mujeres blancas; que 83% de las personas trans experimentaron indirectamente abusos en línea y que 45% de las personas LGBT+ fueron testigos de abusos homofóbicos, transfóbicos o bifóbicos en línea.
El informe más reciente de Glitch 

Glitch es una organización sin fines de lucro fundada por la activista Seyi Okiwowo en el Reino Unido, que trabaja en el ámbito digital y tiene el foco puesto específicamente en la violencia de género en línea. Desde un marco interseccional, Glitch se dedica a promover un cambio político entre las compañías de tecnología y los gobiernos, así como entre las personas que trabajan en el área de la educación y las organizaciones que defienden la seguridad digital. La organización lleva tres años de crecimiento y ya cuenta con reconocimiento internacional por su trabajo. Ha colaborado con otros colectivos para #StandUpToHate (Enfrenta el odio), enseña cómo cuidarse en el ámbito digital y documentó el abuso de mujeres negras en línea en su último informe The Ripple Effect: COVID-19 and the Epidemic of Online Abuse (El efecto dominó: COVID-19 y la epidemia de abuso en línea), que citamos. Gracias a los fondos de Dominemos la Tecnología! lograron expandir el trabajo que habían comenzado luego de recibir un subsidio inicial de APC. Publicaron su primer toolkit con esos fondos y esta vez, crearon una versión 2.0 y llevaron a cabo talleres de “formación de formadores/as”. 

Este kit de herramientas fue compilado para prestar apoyo específicamente a las mujeres negras y todas las personas que quieran ayudar a acabar con la violencia de género en línea contra las mujeres negras y no saben cómo y por dónde empezar. El kit es sumamente fácil de usar y contiene instrucciones y lineamientos para organizar conversaciones interesantes, así como cartas con preguntas y situaciones que impulsen el debate. Este trabajo ayuda enormemente a fortalecer la voz de las mujeres negras y los individuos no binarios, empoderándolos/as para poder desafiar el abuso de poder que viene con la violencia de género en línea, específicamente en las áreas de responsabilidad tecnológica y la presión que se necesita ejercer sobre los gobiernos. Estos talleres de capacitación también ayudaron a las comunidades de todo el Reino Unido y Europa a conectarse entre sí y trabajar en red. 

Los principales objetivos del proyecto de Glitch fueron empoderar al menos a 50 mujeres de la diáspora africana (incluyendo por lo menos un 10% de las comunidades lesbiana, bisexual y transgénero) que trabajan en el área de la violencia de género en línea. Glitch organizó tres talleres en los que participaron 170 individuos, utilizando su nuevo kit de herramientas para capacitar a estos individuos en resiliencia digital y cómo sentirse más confiados en línea. Las personas que participaron hicieron comentarios sumamente positivos sobre el taller:  

Me pareció muy útil, un fantástico equilibrio de información y también tiempo para practicar cómo mantener conversaciones reales de manera que me sienta más cómoda al organizarla. También me gusta mucho subrayar las reglas del chat, tanto por email, previamente, como al inicio de la conversación, y sugerir que las personas escriban su nombre fonéticamente, al igual que los pronombres de cada persona, que son cosas muy importantes para sentirnos cómodas. 

 

La formación y el kit de herramientas me abrieron toda una nueva perspectiva. Tener un marco teórico para un problema social nos ayuda a entender cómo elaborar nuestras respuestas.

 

Adoré este taller. Tuvimos espacio, como participantes, para evaluar y entender que el apoyo en línea es simplemente esencial, sobre todo para las mujeres negras y las personas no binarias que viven situaciones de violencia de género. También fue muy motivador y alentador ver un kit material de herramientas. Con este kit de herramientas, es fácil mostrarle a los empleadores la necesidad de contar esos espacios más seguros, es fácil mostrarle a la gente que recibe nuestras denuncias que este tipo de violencia es real y ocurre muchas veces. Además, nos permite mostrar que los efectos de estas experiencias negativas son validantes. El sólo hecho de tener este kit de herramientas es un sistema de apoyo en sí mismo.

Hacia el final de los talleres, las personas que participaron confiaban en poder usar el kit de herramientas para educar a otras personas y tener más conversaciones sobre como desafar la violencia de género en línea, hacer que usuarios y usuarias asuman la responsabilidad de los abusos que ocurren en las plataformas y permitirles sentir seguridad en los ámbitos en línea. Glitch tiene la certeza de haber movilizado a una red de ciudadanos/as digitales que obligarán a las compañías de tecnología y los gobiernos a hacerse responsables y la capacidad de adaptar este trabajo a varios contextos. El kit de herramientas también se tradujo al portugués porque se necesitaban recursos en esa comunidad para las mujeres negras que participan en las protestas de Black Lives Matter. Glitch se asoció a Minas Programam, “una iniciativa creada en 2015 para desafiar los estereotipos de género y raza que influyen en nuestras relaciones con las áreas de ciencias, tecnología e informática. Promueven oportunidades de aprender a programar entre las mujeres y las jóvenes, dándole prioridad a las negras y las indígenas”. La colaboración con la organización ayudó a compartir el kit con otras organizaciones negras y lusófonas. 

En la evaluación, Minas Programam dijo: 

Este kit de herramientas es relevante para nuestro contexto porque los incidentes de violencia de género en línea contra mujeres negras brasileñas son cada vez más comunes. Diversas organizaciones locales (como Blogueiras Negras, Coding Rights, Rede de Ciberativistas Negras) realizaron investigaciones con usuarias y activistas que fueron víctimas de violencia de género en línea – y la percepción de que las mujeres negras brasileñas reciben ataques con mayor frecuencia que las mujeres de otras etnias está muy extendida. En mi experiencia con Minas Programam, cada vez son más las jóvenes de color que tienen interés en la tecnología y les preocupa ser víctimas de violencia de género en línea, o ya la experimentaron. En los últimos dos años, las niñas y las jóvenes se han acercado a nuestra organización para pedir consejo sobre cómo prevenir y reaccionar ante la violencia de género en línea, cómo protegerse y hacer la denuncia. Cuando nos dirigimos a Glitch, pensábamos específicamente en darle información de utilidad a las personas que nos consultaron a nosotras en el pasado y este recurso es una excelente manera de hacerlo.

El equipo de Glitch estaba increíblemente orgulloso del trabajo que lograron hacer este año, sobre todo en un período tan limitado de tiempo entre dos pandemias, la de Black Lives Matter y la de COVID-19. Trabajaron con la prestigiosa firma británica de abogados Schillings, permitiéndoles actualizar la sección “Conoce tus derechos” para poder brindarle a las mujeres y las personas no binarias una comprensión interseccional de los derechos humanos y digitales. El trabajo de este año puso mayor énfasis en que las personas que son testigo de violencia de género en línea sepan qué hacer – intervenciones activas de observador/a en línea para que las mujeres y los individuos no binarios sientan apoyo y protección, y puedan aprovechar así el espacio en línea en forma segura. 

Junto con el nuevo kit de herramientas, Glitch organizó un programa de otoño-invierno que cubre los conceptos básicos sobre conciencia de la violencia de género en línea, ciudadanía digital, autocuidado y autodefensa para womxn y personas no binarias. Su programa estaba dirigido también a líderes comunitarios/as, para desarrollar las competencias de quienes necesitan formación sobre cómo tener la experiencia más positiva posible en línea. El trabajo de Seyi salió publicado en Marie Claire, dando a conocer el trabajo que está haciendo Glitch, y también se dio a conocer en  conversación con Jameela Jamil, cuando hablaron de lo aprendido a partir de los errores cometidos en línea y cómo estar mejor informadas por el trauma, en lugar de dejarse llevar por él. El increíble trabajo de Seyi fue tapa de Wired, con lo que se amplió aún más el alcance del trabajo que realiza la organización y se abrió la conversación con más comunidades. 

Aún no tenemos ese tipo de conversación pública en torno de la etiqueta y las conductas en línea”, dice. “Realmente existe el supuesto de que como crecimos con internet y tuvimos Windows 95 en la escuela, eso significa que sabemos como navegar en línea de manera segura y respetuosa. 

Este trabajo es fundamental. Es un trabajo que asegura que no damos por sentado que las personas saben cómo protegerse, cómo denunciar los abusos que experimentan y cómo hacer lo posible para mantener la seguridad en línea, tanto para sí mismas, como para su comunidad. También prioriza a las mujeres negras y las personas no binarias, cree en los daños a los que se ven enfrentadas y les enseña las estrategias necesarias para participar activamente en los espacios digitales. Este es un trabajo que nos acerca cada vez más a una internet feminista.